No dejes NUNCA de remar tu propia canoa.

En el viaje que tu haz emprendido, hacia la felicidad, debes vencer las dificultades, que se te presentarán.


Nunca te quedes a la deriva lucha en la vida si tú quieres triunfar,


Rema tu propia canoa hermano, siempre adelante, la meta alcanzarás.


Con dos llaves abríras la puerta, hacia la felicidad, que tu vida sea siempre un gran juego, y un servicio a los demás.


Nuestra vida no tiene sentido, sin amor, justicia y paz, ni el dinero, el placer o la fama, hacen la felicidad.

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